Opinión: |
- Se nos incluyó, sin previo aviso, en lo que parecía un programa dedicado EXCLUSIVAMENTE a la tercera edad, tanto en el hotel como en el balneario, sin que ello suponga ningún rechazo por nuestra parte, tampoco es el ambiente más agradable para el fin de semana.
- En consecuencia (suponemos), la cocina era bastante MEDIOCRE, aunque debemos igualmente constatar, que el servicio del comedor, tras instalarlos en una mesa individual y apartada, nos ofreció siempre con amabilidad alguna otra alternativa al menú fijo que para todo el fin de semana tenían impreso.
- Solicitamos una habitación con dos camas, sin obtenerla, a pesar de realizar algunas llamadas demandándola, a causa de la dolencia de ciática que afectaba a una de las personas, por lo que precisaba cama individual a fin de no molestar a la otra. Pero nos asignaron UNA SOLA CAMA, aunque la habitación era grande y bien equipada.
- Tras un cierto conocimiento sobre balnearios en el territorio nacional, y en la seguridad de que no nos consideramos personas especialmente exigentes, hemos concluido que los servicios incluídos en el "paquete" contratado eran más bien corrientes, no teniendo posibilidad de contratar algún otro alternativo, porque al parecer todo estaba ya reservado, lo que nos llevó a la conclusión de que sencillamente no tenían personal para ello, debido al tipo de cliente que estaba instalado ese fin de semana.
- Para uso común existían dos piscinas pequeñas (de horario bastante restringido), pero la de aguas termales eran de EXCLUSIVO USO TERAPEÚTICO. Hombre, para ir a bañarse a una piscina climatizada, no hace falta ir a un balreario, ni recorrer 300 Km.
En fin, como ven, no ha sido nuestra mejor experiencia en este tipo de instalaciones. Consideramos que el precio no guarda una buena relación con los servicios ofrecidos, y les agradecemos la oportunidad de hacerles estas observaciones.
Mª. Milagros Mayor Val |